Te traigo flores sirias mientras llego
del áspero estallido de la tierra
para arrasar tu vuelo dividido
mientras huyen tus alas de mi boca.
Lo mío no será la diplomacia
ni la vieja ortodoxia de los símbolos,
apenas llama antigua
humana y simple
que resuelve en mal sol
sobre lo mudo.
Más cerca del absurdo que del vuelo
enciendo luces húmedas de sombra
por detrás de las vallas y lo íconos.
Huye la voz de Dios entre los hombres
buscando el ejercicio del abrazo.
que prodigan las letras cuando dicen.
¿Qué escribirás de mí mientras me ausento
a los lugares de soñarme sano?
Cae la realidad de los contrastes
como una sucesión desordenada
para la que no existe una salida
sino una telaraña insobornable.
¿Qué dirá tu periódico del hombre
y la deconstrucción de los silencios?
No olvides la verdad mientras escribes
estas viejas noticias inhumanas.
Trae flores de paja a la frontera.